Si miramos a nuestro alrededor, en nuestro hogar, en el lugar de trabajo, en el lugar de ocio, en la calle… en todas partes hay algún objeto de plástico. Y es que el plástico tiene varios beneficios. El plástico es utilizado en medicina avanzada, en sistemas de seguridad, en multitud de herramientas que utilizamos todos los días sea cual sea nuestro trabajo, en los vehículos, se utiliza para conservar los alimentos durante más tiempo, hace que muchos productos sean asequibles para la población más desfavorecida… Entonces, ¿cuál es el problema del plástico? Los seres humanos. Se nos ha dado un material que los seres humanos no sabemos utilizar con responsabilidad y abusamos de él para después arrojarlo a lugares inadecuados. En realidad, el plástico es uno de los mejores inventos y está sometido a más controles que otros materiales. Para su elaboración se utiliza entre el 4 y 6% del suministro europeo de gas y petróleo, y es un material reciclable. Simplemente, no los sabemos utilizar.
Utilizar tamaños familiares reduce el consumo de plástico
Está claro que, por mucho que se intente lo contrario, en algún momento será necesario recurrir al plástico en nuestra vida cotidiana. A pesar de sus bondades, el problema del plástico es que no es biodegradable, ningún ser vivo lo consume y lo transforma en carbono. El plástico se descompone, pero las partículas de plástico permanecen con la misma composición, por lo que en el planeta existe una gran cantidad de partículas de plástico, incluso se encuentran en el agua que consumimos.
Para evitarlo, no es suficiente con reciclar el plástico que utilizamos, es recomendable poner un límite reduciendo la cantidad de plástico y de ese modo cuidar el Medio Ambiente. Una de las formas de hacerlo es comprando productos a granel. Además de utilizar menos plástico, también es más económico pues se elige la cantidad que se va a necesitar y se ahorra ya que se compra en cantidad y se necesita ir menos de compra reduciendo así también las emisiones de CO2.
Otra forma de reducir el consumo de plástico en casa, cuando la familia está compuesta por varios miembros, es comprar los productos en formato de tamaño familiar. Incluso cuando es para una sola persona, si se tiene la seguridad de que se va a consumir el producto antes de la fecha de caducidad, comprarlo en tamaño familiar resulta un ahorro tanto en dinero como en plástico. Se ha de tener en cuenta que los productos cosméticos caducan. En la tienda verdepasion.com se pueden encontrar varios productos ecológicos envasados en tamaño familiar y para su suministro a granel. Es la forma más natural, y por lo tanto más saludable, de cuidar el cuerpo, la salud y el Medio Ambiente. Más info sobre productos a Granel aqui
Habitos de consumo del plástico
Estamos tan acostumbrado a el que a veces no nos damos cuenta de cuanto residuos plásticos generamos. Si solo podríamos centrarnos en reutilizar los frascos rellenándolo de productos
a granel en cada hogar tendríamos un ahorro muy importante de residuos que entran cada día en nuestro ecosistema.
Además cabe acordar que respecto a la limpieza del hogar seria aconsejable reducir la presencia de tantos productos específicos que pueden ser substituido por Vinagre, limón y bicarbonato que hacen maravilla en casa sin necesitad de adquirir tantos envases.
Es importante también recordarnos que todo lo que utilizamos en casa va directamente en el mar através de desague así que es importante utilizar productos ecológicos que no contengan sobretodo fosfatos y nitratos que son responsable de la reducción de oxigeno en nuestro mares y consecuentemente dificultan la sobreviviencia de los organismo marino.
Cómo nos afecta el plástico
El plástico no se desintegra, pero se puede reciclar. Si no hacemos un uso adecuado de él, no debemos pensar que únicamente afectará a los animales. Se ha de tener en cuenta que consumimos animales, agua y plantas para sobrevivir, que el plástico que no hemos sabido tratar adecuadamente, bien por pereza o bien por desconocimiento, terminará en las aguas, en el estómago de los animales y en la tierra en la que crecen las plantas; también en el agua con el que regamos las plantas que comemos. Finalmente, estará en nuestro organismo y, del mismo modo que ocurre con los animales, nuestro cuerpo no está diseñado para digerir plástico. En nuestras manos está el uso responsable del plástico. Podemos agradecer sus beneficios sin perjudicarnos a nosotros y al resto del planeta.
La reducción de plástico y el cuidado del Medio Ambiente nos corresponde a los humanos. Los animales y las plantas, de los cuales también nos beneficiamos, ya sea conviviendo o comiéndonoslos, viven de forma natural, no nos perjudican.